lunes, 9 de abril de 2018

Fin de semana vasco



El fin de semana ha sido una bonita experiencia fuimos a correr el GP Primavera de Amorebieta toda la familia mi mujer, Oscar, Jonas, Sonia, Nachi fuimos el viernes con tiempo con la furgoneta con toda la motivación y ganas como el que va a un mundial con la española y cuando llegamos se puso a llover, la probabilidad de lluvia era del 70% y así fue, nos cayó el 70% del agua en la carrera.



Llegamos el viernes de madrugada a la pensión Bide Ondo de Amorebieta, donde nos trataron como en casa, habilitaron el garaje para lavar las máquinas y hacer rodillo, comida y trato inmejorable.
El sábado descansamos y recogimos a Odin uno de los dos noruegos del equipo del aeropuerto fuimos a comprar unos alimentos "pepino" como dice Oscar para desayunar bebida de avena, copos de avena, pan de centeno, fruta... hicimos rodillo porque se puso a llover a muerte, cenamos y a descansar.

El domingo amaneció lloviendo Oscar se despertó a las 5 para desayunar como si fuera la Roubaix, los demás desayunamos a las 6:30 menos Leon que vino con problemas intestinales todo el viaje enfermo, así salimos con un compañero eliminado, fuimos al lugar de la salida a preparar el ligero equipaje para la carrera bidones, alimento y un manojo de nervios como cuando un cadete va a la primera carrera del año al lado del autobús del Movistar y de los autobuses de los equipos Pro Conti, los pequeños no tenemos un superautobús y tenemos que salir calentando nada más llegar. Así aproveché para saludar a la gente conocida vi a Sabino Angoitia en el coche neutro Spiuk y fuimos a firmar. Con la emoción de haber llegado olvidamos que no habían abierto el control de firmas así que fuimos uno de los primeros equipos en firmar y fuimos a la linea de salida.

De salida los típicos ataques en el tramo llano, muy pronto se hizo la fuga de cuatro corredores con un Caja, un Manzana, un Euskadi, un Lokosphinx y muy pronto consiguieron 3 minutos. Se puso a llover todavía más fuerte y el Movistar se puso a controlar, con apenas dos hombres mantuvieron la ventaja fácilmente hasta la entrada al circuito donde se subían Montecalvo y Autzagane en cuanto pusieron ritmo fuerte el pelotón se redujo, ya en el primer paso por Montecalvo a un grupo de unos 40 y nos descolgamos Edu y yo nos pegamos la remada y volvimos a entrar.




A mitad del circuito me dio un subidón viendo a Ana, Francis, Sonia y Nachy animando desde la cuneta.
Al segundo paso por Montecalvo nos volvimos a quedar en Edu y yo de nuevo,  esta vez no pudimos volver al grupo, al poco nos quitó el juez de carrera y continuamos Edu y yo disfrutando pese al frío y la lluvia del calor de la afición que llena las carreteras animando en la cuneta.

Personalmente me fui con un sabor agridulce pues no acabar la carrera después de que viniera la familia y amigos a verme no era lo que yo quería pero al menos he podido disfrutar de la experiencia y me siento muy arropado y agradecido por el cariño que me han dado sobretodo a mi mujer que me acompaño hasta en el coche en carrera.
A pesar de no acabar la carrera ha sido una buena experiencia para ver los puntos débiles sobre los que hay que reforzar para poner el motor a pleno rendimiento al máximo nivel de nuevo y fijarnos en los objetivos de la temporada.
Todavía queda mucho trabajo por hacer. Nos vemos pronto.

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